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Islas Cíes: secretos, rutas y normas para una visita inolvidable

Las Islas Cíes, parte del Parque Nacional Marítimo-Terrestre de las Illas Atlánticas, son un tesoro natural en Galicia. Solo 1 800–2 000 personas al día pueden acceder tras solicitar permiso y reservar ferry. Además de la mundialmente famosa Praia de Rodas, ofrecen rutas, fauna protegida, camping limitado y normas estrictas para preservar su riqueza.

¿Te has preguntado alguna vez qué esconden las Islas Cíes más allá de su famosa playa de arena blanca? A veces, ese paisaje que aparece en Instagram es solo la punta del iceberg. Muchos visitantes se quedan en Praia de Rodas sin conocer los secretos del archipiélago—desde su biodiversidad única, hasta las rutas de senderismo menos transitadas y normativas clave para una visita responsable.

 

¿Qué son las islas Cíes y por qué visitarlas?

 

Las Islas Cíes son mucho más que una postal gallega bonita. Son un espacio protegido de alto valor ecológico y cultural, situado frente a la ría de Vigo, en la provincia de Pontevedra. Este archipiélago forma parte del Parque Nacional Marítimo-Terrestre de las Islas Atlánticas de Galicia, un tesoro natural que representa como pocos la Galicia más salvaje, auténtica y frágil al mismo tiempo.

 

Un santuario natural en pleno Atlántico

 

Las Cíes están compuestas por tres islas principales:

  • Monteagudo (norte),
  • do Faro (centro, unida a la anterior por la famosa Praia de Rodas),
  • y San Martiño (sur, solo accesible en barco privado).

A este conjunto se suman varios islotes y formaciones rocosas (como Agoeiro, Ruzo o Penela dos Viños) que contribuyen a la riqueza biológica del entorno. De hecho, ya hemos hablado por aquí de las cuatro islas que ver en Galicia sí o sí para una visita de 10.

Desde 2002, el archipiélago goza de máxima protección ambiental como parte del Parque Nacional, convirtiéndose en una de las pocas zonas en España donde la conservación prima por encima del turismo. Esto se traduce en accesos limitados, infraestructura mínima y una fuerte sensibilización medioambiental, lo que genera una experiencia diferente a cualquier otra playa o destino costero del país.

 

¿Por qué deberías ir a las islas Cíes?

  1. Porque no hay otro sitio igual en Galicia.
    Es un espacio sin coches, sin hoteles, sin chiringuitos. Solo tú, la arena, el monte y el mar. Para muchos visitantes, pisar Rodas por primera vez se asemeja a llegar a otro planeta... o al paraíso.
  2. Porque estás entrando en un ecosistema frágil.
    Aquí anidan más de 22.000 parejas de gaviotas patiamarillas, una de las mayores colonias del sur de Europa. También viven cormoranes, alcatraces y hasta delfines mulares. Bajo el agua, los fondos marinos son un festival de algas, moluscos y peces protegidos. Cada paso, cada foto, cada decisión que tomas en la isla cuenta.
  3. Porque es el plan perfecto si te gusta la naturaleza en serio.
    Senderismo con vistas infinitas, playas sin aglomeraciones, cielos nocturnos sin contaminación lumínica... Las Cíes son el anti-parque temático. Nada está pensado para "entretenerte", sino para invitarte a mirar, respirar y respetar.
  4. Porque es uno de los enclaves mejor valorados por la prensa internacional.
    El periódico británico The Guardian la catalogó como “la mejor playa del mundo” en 2007. The Times la calificó como “la joya más bonita” de Galicia. Pero lo que de verdad importa es que sigue siéndolo sin necesidad de convertirse en un parque acuático ni en un reclamo masivo.

Datos clave para viajeros exigentes

Atributo clave

Dato relevante

Parque Nacional desde

2002

Accesos diarios permitidos

Entre 1.800 y 2.000 personas/día (verano)

Habitantes

0 (no hay población permanente)

Isla más accesible

Monteagudo (por ferry desde Vigo, Cangas...)

Playa más conocida

Praia de Rodas (520 m de arena blanca)

Fauna destacada

Gaviotas, cormoranes, delfines

Vegetación endémica

Bosques de laurisilva y brezales atlánticos

 

Cómo planificar tu visita a las Islas Cíes (sin liarla)

 

Visitar las Islas Cíes no es como improvisar una escapada a la playa más cercana. Este paraíso tiene aforo limitado, normas estrictas y logística particular. Para que no te quedes en tierra o cometas errores de novato, aquí te explico paso a paso cómo organizar tu experiencia:

 

1. Solicita el permiso de acceso (sí, es obligatorio)

 

Desde 2018, la Xunta de Galicia exige un permiso gratuito para acceder a las Cíes en temporada alta (Semana Santa, verano y puentes).

  • Dónde se pide: en la web oficial autorizacionillasatlanticas.xunta.gal.
  • Cuándo solicitarlo: se abre el plazo hasta con 90 días de antelación.
  • Cuánto dura: tienes 2 horas desde que lo consigues para vincularlo a una reserva de ferry o lo pierdes.

Este paso no es negociable. Sin autorización, no puedes embarcar.

Pro tip: algunas navieras ya te tramitan el permiso junto con el billete (Mar de Ons, Piratas de Nabia…), ideal si no quieres complicarte.

 

2. Reserva el ferry (porque nadar no es opción)

 

Las islas Cíes no tienen puerto deportivo ni aeropuerto. Solo puedes llegar por barco autorizado desde Vigo, Cangas o Baiona.

  • Duración del trayecto: unos 40–45 minutos.
  • Precio orientativo: entre 18 € y 25 € ida y vuelta por adulto.
  • Temporada alta: hay salidas cada hora o media hora.
  • Temporada baja: muy pocas plazas, y solo para grupos organizados (centros educativos, asociaciones…).

Consejo: compra con antelación, sobre todo en julio y agosto. Los barcos van muy llenos y quedarse sin plaza es más común de lo que parece.

 

3. Escoge bien la fecha (y la compañía)

  • Verano: más servicios, más afluencia y buen clima. Ideal si buscas baños, sol y paseos.
  • Primavera u otoño: menos gente, colores espectaculares y rutas tranquilas. Ojo con el tiempo: el Atlántico es caprichoso.
  • Semana Santa: altísima demanda. Planifica con tiempo.

Evita días de alerta meteorológica: las navieras pueden cancelar trayectos y, si vas por libre, puedes quedarte sin reembolso.

 

4. Decide si te quedas a dormir

 

No hay hoteles, hostales ni glamping en las Cíes. Solo existe el camping Islas Cíes, una concesión autorizada para acampar:

  • Capacidad limitada.
  • Abierto solo en temporada alta (junio–septiembre).
  • Puedes llevar tu tienda o alquilar una allí.
  • Tiene baños, duchas, restaurante y supermercado básico.

Reservas: se hacen desde la web oficial del camping (no a través de Booking ni similares).
Estancia máxima: 5 noches.

Si decides quedarte, verás una Cíes completamente distinta al caer la tarde, cuando se van los ferris. Silencio, estrellas y gaviotas.

 

5. Conoce las normas antes de llegar

 

Esto no es un parque acuático ni un destino de turismo masivo. Las reglas están para preservar el entorno, y no seguirlas puede implicar sanciones (o algo peor: dañar un ecosistema único).

Prohibido:

  • Tirar basura (tienes que llevarla contigo de vuelta).
  • Encender fuego o cocinar.
  • Acampar fuera de la zona habilitada.
  • Salirse de los caminos marcados.
  • Llevar mascotas.
  • Extraer flora, fauna o minerales.
  • Pescar o hacer submarinismo sin autorización especial.

Permitido:

  • Senderismo en rutas señalizadas.
  • Bañarse en las playas.
  • Acampar en el camping.
  • Uso responsable de dispositivos electrónicos (no es un sitio para ir a poner el altavoz a tope).

¿Y si quiero ir en barco privado?

 

También puedes, pero con matices:

  • Debes solicitar un permiso especial para fondear.
  • Solo se permite fondeo en zonas marcadas (normalmente en la isla de San Martiño).
  • No puedes desembarcar sin autorización. Las embarcaciones no pueden acceder a zonas de baño o a playas como Rodas.

Este tipo de acceso es ideal para perfiles que buscan una experiencia premium o para el viajero que ya conoce las Cíes por tierra y quiere otra perspectiva.

 

Checklist rápida para ir a las islas Cíes con todo cubierto

 

  • Permiso solicitado
  • Ferry reservado
  • Clima consultado
  • Mochila preparada
  • Calzado cómodo
  • Comida y agua
  • Bolsas para residuos
  • Cámara o móvil cargados
  • Activar respeto por el entorno.

 

Qué hacer y ver en las Islas Cíes: playas, rutas y secretos naturales

 

Las Islas Cíes no son lugar de postureo, son territorio sagrado para quienes buscan belleza sin artificios. Si has llegado hasta aquí, es porque te interesa más el contenido que la postal, y eso se nota. 

A continuación te contamos qué ver y hacer —y sobre todo, qué no perderte— en esta joya gallega del Atlántico.

 

1. Playa de Rodas: la reina absoluta

 

Nombrada por The Guardian como la mejor playa del mundo en 2007, la Praia de Rodas es el epicentro visual de las Cíes.

  • Más de 500 metros de longitud de arena blanca y fina.
  • Aguas turquesas, casi caribeñas (aunque la temperatura... Galiza style: entre 12 °C y 16 °C).
  • Une las islas de Monteagudo y Faro con una lengua de arena que parece un puente natural.

Perfecta para: desconectar, tomar el sol, sacar la foto que todos quieren, y empezar tu ruta desde ahí.

 

2. Rutas de senderismo con vistas de otro planeta

 

Las Cíes tienen cuatro rutas oficiales de senderismo (bien señalizadas, gratuitas y con distintos niveles de dificultad). No se pueden salir de estas rutas, pero no hace falta: las vistas te van a volar la cabeza.

Ruta

Longitud

Dificultad

<Qué ver

Alto do Príncipe

3 km

Baja

Acantilados, mirador del “sillón de la reina”

Faro da Porta

5,2 km

Media

Panorámica sur, zona más salvaje

Faro de Cíes (Faro do Monte Faro)

7,4 km

Media/Alta

El faro más icónico, vistas de 360º

Faro do Peito (Faro de A Porta)

5,3 km

Media

Parte norte, vistas hacia Ons

Recomendación: si solo haces una, que sea la del Faro de Cíes. Son 2 horas (ida y vuelta) pero las vistas desde arriba… simplemente inolvidables.

 

3. Playas para todos los gustos (y casi todas desiertas)

 

Además de Rodas, las Cíes esconden varias calas y playas con personalidad propia. Algunas son nudistas, otras perfectas para el snorkeling o el aislamiento total.

  • Figueiras: la “playa nudista” (aunque no exclusiva), más tranquila y menos masificada.
  • Nosa Señora: al sur de la isla do Faro, agua transparente y entorno más rocoso.
  • San Martiño: solo accesible en barco privado, arena dorada, y un aire de isla desierta total.
  • Areíña, Margaridas, Bolos: pequeñas calas ideales para huir de Rodas en agosto.

Tip para los curiosos: en marea baja se forman piscinas naturales en algunas zonas. Pregunta a los guías o vigilantes por los mejores puntos para verlas.

 

4. Avistamiento de fauna (sí, hay gaviotas… pero no solo)

 

Las Cíes son una zona de nidificación clave para decenas de especies de aves. Pero además, si vas atento y respetas el entorno, puedes ver:

  • Cormoranes moñudos: se sumergen a pescar como si fueran lanzas vivas.
  • Delfines mulares: avistables desde ferry o costa si hay suerte.
  • Araos y alcatraces: aves marinas potentes, difíciles de ver en otros lugares.
  • Lagartijas gallegas y hasta alguna especie endémica que solo vive allí.

Si llevas prismáticos o teleobjetivo, disfrútalo. 

 

5. Camping (la experiencia mágica que nadie te cuenta)

 

Dormir en las Cíes es como colarse en un backstage del paraíso. Cuando se va el último ferry, todo cambia. Silencio. Atardecer. Cielo estrellado sin contaminación lumínica. Sonidos del mar.

El camping Islas Cíes es el único punto autorizado para pasar la noche.

  • Puedes alquilar tienda allí mismo o llevar la tuya.
  • Tiene baños, duchas y un pequeño restaurante/tienda.
  • Solo abre en temporada alta y exige reserva previa.

Si viajas con espíritu slow o buscas una experiencia real, esto es lo más cercano a vivir dentro del Parque Nacional.

 

6. Lo que no vas a ver y lo que sí en las islas Cíes

 

Las Cíes no tienen bares de copas, ni motos de agua, ni beach clubs. No hay música enlatada ni cócteles de colores. Lo que sí hay es:

  • Silencio
  • Luz limpia
  • Olores de mar y monte
  • Texturas de roca, pino y arena
  • Paisaje sonoro de gaviotas, viento y pasos en la grava

¿Cuántas personas pueden visitar las Cíes cada día?

 

En temporada alta, el cupo está limitado a unas 1.800–2.000 personas diarias. En temporada baja o fuera de verano, el acceso está restringido a grupos educativos o con permisos especiales, con un límite de unas 450 personas/día.

 

¿Cómo solicito el permiso obligatorio?

 

Puedes gestionarlo tú mismo en la web oficial de la Xunta: autorizacionillasatlanticas.xunta.gal. Solo tienes 2 horas desde que lo obtienes para enlazarlo a tu reserva de ferry. Algunas navieras lo tramitan directamente al comprar el billete.

 

¿Puedo acampar en cualquier sitio?

 

No. Solo puedes dormir en el camping oficial de las islas, que requiere reserva previa. Acampar fuera de esa zona está estrictamente prohibido y sancionado.

 

¿Se puede visitar todo el año?

 

No exactamente. Las navieras solo operan en temporada alta (verano, Semana Santa y algunos puentes). Fuera de esas fechas, solo hay acceso con permisos especiales y muy limitados.

 

¿Hay bares, tiendas o chiringuitos?

 

No. Solo hay un pequeño restaurante y tienda en el camping. Te recomendamos llevar tu propia comida y agua (y tus bolsas para la basura).

 

¿Se puede llevar dron o altavoz?

 

No. Están prohibidos tanto los drones como cualquier tipo de dispositivo que altere la paz sonora del parque. Lo mismo aplica a las mascotas.

 

Visitar las Islas Cíes no es un simple "planazo veraniego". Es una experiencia que te reconcilia con lo esencial. Frente al exceso turístico, aquí todo invita a la pausa, la conciencia y el respeto.

Y eso —ese cuidado por lo auténtico, lo bien hecho, lo que nace de la tierra y se respeta— es una filosofía que compartimos también desde Mundo Estrella Galicia. Porque hablar de Galicia no es solo hablar de paisajes: es hablar de cultura, de tradición y de compromiso con el entorno.


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